Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2008

A LA HORA DEL MATE..

A la hora del mate* Al hombre la conocí en casa de Bob, mi ex suegro. Era uno de los tomadores de mate, o amigos de la hora del mate que se aparecían cualquier día a la hora señalada: 17. 00 horas, ni antes al costo de interrumpir la siesta sagrada de mis suegros. ni mucho después cuando los ánimos y el mate se lavaban inevitablemente. Era, el flaco o el flaco Corwin, como todos le llamaban. Un vecino del barrio cuya amistad con Bob se limitaba a 30 minutos en visitas de una o dos veces a la semana. Era un misterio el hombre. Un hombre que se mostraba como tempranamente envejecido y que no llegaba a los 70 años pero si los aparentaba. Flaco, flaquísimo, la espalda encorvada. La mirada algo torcida con ojos claros muy hundidos en el rostro. Uno lo definiría como un gringo colorado, seguramente hijo de italianos que se establecieron, trabajaron, criaron un hijo y se murieron en esta tierra hablando en su dialecto. y lo mínimo en la castilla. Pero esto -por supuesto- no viene al caso,