*Foto de Emilia Tronando .                                       TERCERA MUJER CERCA DEL FUEGO*           Que simules   ver una mujer cerca del fuego y que su vida sea un cuento   para dormir. Una mujer con la lengua   llena de lastimaduras,   ésas que producen las palabras   deformes. Que simules ver el Aqueronte   cerca, a sólo un paso, el inestable color del vino en tu mirada   y en la mujer con frío. Que simules   ver una mujer cualquiera como las otras,   y que se te agote la vista   ante esa cosa oscura de los perros   que ladran a la luna,   como si supieran   como si la mujer supiera   el salto del instante. Que simules   la secreta unción que une al fuego y las mujeres,   el cielo verde y los hielos, o que simules   ver a la pobre mujer de Brueghel   como virgen etérea que apresa al unicornio.   Es tarde ya para simulaciones,   para soñar paraísos:   cualquier hecho es el primero de la serie   o el último.   Y cualqu...