De lado a lado del patio, de pared a pared, las manos fuertes de mi padre tensando el alambre galvanizado que no se oxida. Atándolo en un par de clavos como yo no podría hacerlo.
¿Porque eran sus manos tan fuertes? Toda su fuerza aplicada a la tenaza.
¿Cuantos años tiene ese alambre para tender la ropa?
No menos de 45 años.
Después de la lluvia están las gotas suspendidas, casi congeladas. En este amanecer de oscuridad condensan luz como una brillante cadena de perlas en la extensión del alambre. Sólo broches de plástico interrumpen cada tanto la continuidad de sus brillos.
La imagen de las manos de mi padre.
Como la parra y los zorzales buscando las últimas uvas.
Esas gotas también son permanencias.
¿Porque eran sus manos tan fuertes? Toda su fuerza aplicada a la tenaza.
¿Cuantos años tiene ese alambre para tender la ropa?
No menos de 45 años.
Después de la lluvia están las gotas suspendidas, casi congeladas. En este amanecer de oscuridad condensan luz como una brillante cadena de perlas en la extensión del alambre. Sólo broches de plástico interrumpen cada tanto la continuidad de sus brillos.
La imagen de las manos de mi padre.
Como la parra y los zorzales buscando las últimas uvas.
Esas gotas también son permanencias.
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